Descripción del vídeo
[Rendición de cuentas, por parte de representantes de cada área de la DFOE]
Máximo Moraga, Área de Fiscalización de Servicios Económicos: Los funcionarios de la División de Fiscalización Operativa y Evaluativa nos comprometemos a luchar contra la corrupción, mediante la vivencia diaria y plena de nuestros valores: compromiso, integridad, excelencia, respeto y justicia.
Karina Bonilla, equipo de apoyo Gerencia DFOE: Manteniendo nuestra independencia de criterio
Hellen Alvarado, Área de Fiscalización de Servicios Ambientales y de Energía: y actuando con transparencia
Carlos Gónzalez, Área de Seguimiento de Disposiciones: Buscando la innovación y creatividad en nuestra labor, fortaleciendo la prevención de actos de corrupción
Mercedes Gónzalez, Área de Denuncias e Investigaciones: También, para este 2016, nos comprometemos a llevar a cabo el proyecto “Mejoremos juntos nuestro bienestar”.
Josué Solano, Área de Secretaría Técnica: Cuyo objetivo es fortalecer los valores en nuestra División
Laura Ramírez, Área de Fiscalización de Servicios de Infraestructura: Reflexionar sobre nuestro propósito de vida
Bernal Durán, Área de Fiscalización del Sistema de Administración Financiera de la República: Mejorar los canales de comunicación y las relaciones entre todos los que conformamos la División
Hannia Mena, Área de Fiscalización de Públicos Generales: Para construir una cultura diferente
Gabriela Delgado, Área de Fiscalización de Servicios Sociales: Vivir una constitución organizacional
Rafael Arguedas, Área de Fiscalización de Servicios para el Desarrollo Local: y así desarrollar una filosofía de liderazgo divisional
[Mediante una infografía, Humberto Perera y Rebeca Calderón, ambos funcionarios del Área de Fiscalización de Servicios Sociales, exponen el Compromiso 2016]
Este fue nuestro compromiso 2016 y lo desarrollamos mediante la implementación de una filosofía de liderazgo divisional, que comenzó con la ejecución de la encuesta “Mejoremos juntos nuestro bienestar”, la cual permitió recabar información y opinión sobre aspectos relacionados con los temas de interés de nuestra División.
También, se llevó a cabo la encuesta sobre desarrollo personal y divisional, con el fin de conocer y tomar en cuenta la opinión de los funcionarios, y así tener un insumo importante para la toma de decisiones en esta materia.
Desarrollamos el programa de fortalecimiento de las competencias, con el fin de orientar las capacidades de nuestro personal para logro de objetivos divisionales e institucionales.
Impulsamos la gestión por valores, mediante un estilo gerencial que procura la excelencia de nuestros productos.
Se capacitaron a los Asistentes Técnicos y Fiscalizadores a cargo de presupuesto en talleres de mejora continua
Y por último, se instauró la Comisión de Transferencia de Conocimiento para gestionar un balance entre las diversas generaciones que conforman nuestro equipo de trabajo.
Esta es la historia de cómo lo vivimos
[Se abre un libro, y comienza la lectura del cuento “Dejando tu huella”, cuyos personas son representados por medio de hormigas animadas]
Narrador: Había una vez una hormiguita llamada Luz que soñaba con servir a los demás, y hacer un mejor país.
Luz: “¡Hoy será un gran día!, lo sé… voy a darlo todo”
Narrador: Pensaba Luz con entusiasmo cada mañana cuando se disponía a trabajar.
Luz vivía en un lugar un poco alejado, y tenía que tomar un autobús para llegar a la gran ciudad, donde estaban los grandes edificios, pero había uno que siempre le llamaba la atención.
Su familia sentía que tenía un trabajo importante, y la animaban a continuar cada día, pero la realidad era que Luz sentía un poco triste porque sus compañeros se comportaban indiferentes en este trabajo y en el anterior también…
Sus “Buenos días” sonaban como un eco en su oficina.
Luz: ¡Buenooos días! (eco)
Narrador: Y a pesar de que se esforzaba mucho, cada vez que intentaba dar una opinión, o tener una idea para mejorar algo, sus compañeros respondían con frases como:
Compañeros: “eres muy nueva”, “no tienes derecho a opinar”, “estás soñando, eso nunca se ha hecho aquí”, “¿cuándo aprenderás que las cosas se hacen de este modo?”, “¿qué se cree esa?, viene con muchas alas”.
Narrador: Al tiempo, Luz vio un anuncio de trabajo en aquel lugar que le llamaba tanto la atención, tenía vista a un lago, y un gran parque donde podía ir a caminar al salir del trabajo. Además, lo que más la motivó, fue saber que esa institución tenía una misión muy importante para el país.
Luz: ¡Voy a intentarlo!, nada se pierde
Narrador: pensó Luz con algunas dudas porque sabía que solo los mejores trabajan ahí.
Entusiasmada y nerviosa, envió sus papeles y esperó la llamada... Luz estaba muy esperanzada de trabajar en esa institución, donde le permitiera cumplir con su sueño de aportar con su granito de arena por un mejor país.
Durante el proceso, Luz se tuvo que preparar mucho para las pruebas que debió realizar. Nadie se imagina su alegría cuando recibió la llamada, se sintió realmente una triunfadora, ¡por fin iba a trabajar en esa Gran Institución!
Llegó el gran día, su primer día en la oficina:
Luz: ¿Cómo serán mis compañeros?
Narrador: Pensó Luz, con una mezcla de timidez e incertidumbre
Luz: ¿Tomarán en cuenta mi opinión, me aceptarán?
Narrador: La recibió “don Motivación”, quien la presentó a sus nuevos compañeros.
Primero conoció a “Integridad”, una hormiga que tenía ya muchos años de trabajar ahí, le comentó todo lo que se hacía en la oficina…
Luz: “ Wow, me gustaría saber tanto como ella”
Narrador: pensó Luz. Al pasar de los días, Luz se dio cuenta que esta vez era distinto, se sintió confiada y segura.
Al poco tiempo, Luz se sentía libre de dar sus ideas, tanto a Integridad como a sus compañeros Excelencia y Compromiso, la escuchaban con atención. Su jefe don Motivación, le animaba a seguir participando y a dar lo mejor de sí.
Era feliz compartiendo su tiempo de almuerzo con su amiga Justicia, quien con sus enseñanzas y anécdotas de la vida, le permitió analizar las consecuencias y recompensas de sus acciones, de la misma manera, Luz le aconsejaba sobre la apertura a la tecnología y nuevas formas de hacer las cosas.
Los proyectos en los que Luz participaba se fueron haciendo cada vez más y más complejos, y a pesar de la gran responsabilidad, ella sentía que tenía un deber con el país, así que trabajaba con mucho entusiasmo junto a su compañero Respeto.
Un día entró a la oficina un nuevo compañero, se llamaba “Innovación” y fue la misma Luz quien lo recibió esta vez. ¿Saben que hizo Luz? Además de su amistad, le brindó su conocimiento.
Luz: “Sabes, lnnovación, ahora ¡formas parte de nuestra familia!”.
Fin
[Se cierre el libro de cuentos y finaliza el vídeo]